Mi segunda salida con el club Burgman más concretamente con la delegación Euskadi y estaba esperando desde hace tiempo la escapada ya que la compañía es excepcional.
Me levanto pronto (hemos quedado a las 8), ducha, ropa de invierno ya que hace un frió del carajo y cojo la moto. Me acerco a la gasolinera a llenar el depósito y Oh! Oh! Empieza a llover tímidamente pero el agua es agua, así que me pongo el mono para no mojarme y arranco hacia Miribila donde hemos quedado. Una vez hemos llegado todos y nos calentamos a base de saltitos arrancamos las motos y nos dirigimos hacia Zornotza donde hemos quedado con más gente nos dirigimos hacía Gernika y pasando Muxika empieza a llover más intensamente, incluso a nevar, y pequeña parada para que algunos se pongan el traje para el agua (iban de machitos en la salida, je je) cogemos la carretera por Laida, Laga, dirección a Deba

(1)todos en fila preparandonos para la torrtilla y cafecito (2) todos reunidos en Deba

pero por el camino paramos a desayunar en Lekeitio un cafecito bien caliente para calentar los pies que no sentimos los dedos. Justo al entrar el camarero saca una tortilla recién hecha y se la acabamos ya que la pinta que tenía era impresionante y como estaba ni lo digo, bueno sí, buenísima.
Arrancamos las motos y entre despiste y despiste llegamos a Deba y se acaban de sumar al grupo los dos últimos integrantes. Y por supuesto la foto de grupo de rigor.
Arrancamos de nuevo dirección Azkoitia y hacemos una visita al museo del tren, muy guapo y con unas máquinas desde trenes de carbón y vapor hasta maquetas del metro y tranvía de Bilbao.

(1)(2) detalles del museo del ferrocarril (2)Autofoto en el mismo

Ahora sí al restaurante en errezil y a comer. Como siempre buena comida y mejor compañía. Después de llenar los estómagos y calentar el cuerpo un poco, no hemos pasado de los 4,5 grados en todo el camino, cojemos con no muchas ganas las motos y camino de nuevo. Antes de arrancarnos despedimos de un par de ellos y cogemos dirección Bilbo pero pasando por Zumarraga, Bergara, Mondragón, Elorrio (donde no tomamos el último café y así nos despedimos) llenamos los depósitos de gasolina y nos volvemos a despedir (la de despedidas que hacemos al cabo del viaje) y ahora sí hacia casa, Durango, Amorebieta y Bilbao donde ya los que quedamos nos despedimos en marcha.
Llego a casa y a descansar. Eso sí ya soy miembro oficial del club, no sabéis la que os a caído chicos.

Espalda de un motero

Como siempre agradecer a todos el buen rollo que hay y lo bien que lo pasamos.
Hasta la próxima.